Proteger la salud intestinal en verano es todavía más importante que en otras fechas del año. Si mantienes el adecuado equilibrio en la flora intestinal mejorarás tu salud digestiva. En estos meses cálidos, te conviene consumir alimentos frescos bien seleccionados.
Por ello, en Proasis queremos ayudarte a escoger correctamente qué incluir, y qué no, en tu dieta veraniega. Los probióticos en verano son más determinantes de lo que imaginas.
¿Por qué conviene mantener una flora intestinal equilibrada en el verano?
Valorar la microbiota estacional es clave para optimizar la salud digestiva. El verano suben las temperaturas, nos exponemos mucho más directamente al calor y experimentamos cambios en la alimentación, sobre todo en vacaciones. Todo ello suele afectar negativamente la flora intestinal y ocasiona problemas gastrointestinales.
Si consigues mantener una flora intestinal equilibrada no solo vas a tener digestiones adecuadas, también fortalecerás el sistema inmunológico y facilitarás la absorción óptima de nutrientes esenciales para el organismo.
Por ello, te conviene adoptar hábitos que promuevan la salud intestinal. Y, para ello, la clave está en la nutrición. La mejor noticia es que existen muchos alimentos digestivos fríos que te impulsan en la dirección adecuada.
Mejores alimentos digestivos fríos para la salud intestinal en verano
¿Piensan que va a ser sacrificado comer bien en verano para mantener una correcta flora intestinal? ¡Al contrario! Hay alimentos superapetitosos a tu disposición. Hemos seleccionado los 8 alimentos top para tu salud intestinal veraniega. ¡Te van a encantar!
Helados probióticos
Comer determinados helados en verano ayuda a tu microbiota estacional. ¿No te parece una excelente realidad? Tienes que elegir aquellos denominados probióticos; es decir, elaborados con Lactobacillus o Bifidobacterium, porque son los que te ayuda a equilibrar la flora intestinal.
La carta de estos helados probióticos en Proasis es incomparable. Tienes la posibilidad de escoger entre cinco sabores formidables: yogur con sabor frutos del bosque, stracciatella con chips de cacao belga, vainilla de Madagascar con caramelo, chocolate con pepitas de chocolate belga y mango.
Su ventaja adicional es que apenas llevan azúcar y grasas trans, por lo que resultan tan refrescantes como digestivos. Y, todo sea dicho, ¡están buenísimos!
Yogur natural o griego (sin azúcar)
Es, asimismo, una fuente fabulosa de probióticos. Asegura las digestiones fáciles, es saciante y combina genial con frutas y batidos fríos. Si te apasiona la cocina creativa, empléalo como salsa original en determinadas ensaladas.
Frutas ricas en agua y fibra
Estos productos nos apetecen muchísimo en verano, sobre todo después de haber hecho ejercicio o cuando precisamos hidratarnos. Frutas como la sandía, el melón, la piña, el mango o la papaya estimulan el tránsito intestinal e incorporan enzimas digestivas naturales. ¿Un par de ejemplos? La piña lleva bromelina y, la papaya, papaína.
Infusiones frías digestivas
Entre las opciones más recomendables figuran la menta, la manzanilla, el hinojo y el jengibre. Su consumo resulta calmante para el estómago y, también, reduce la hinchazón y los cólicos.
Te recomendamos tomarlos en su versión cold brew, consistente en reemplazar la preparación en caliente por un reposo durante varias horas en agua fría. Lo normal es un proceso de entre 4 y 12 horas y siempre se sirve en frío para combatir el calorcito estival.
Ensaladas con vegetales ricos en fibra soluble
¡Cómo no te va a apetecer una rica ensalada cuando la temperatura es alta! Si la elaboras con aguacate, espinaca, pepino, zanahoria y escarola, conseguirás digestiones mucho más plácidas y libres de irritaciones. ¿El mejor condimento adicional en esta elaboración culinaria? El vinagre de manzana, cuyo efecto prebiótico ligero completa los beneficiosos efectos probióticos de verano de esta clase de platos.
Kéfir frío de agua o leche
Es una opción altamente probiótica, incluso más que el yogur. En estas fechas de calor, te sugerimos preferir la versión de agua, pues es todavía más ligera. Tiene un doble efecto adicional altamente recomendable: mejora tu sistema inmune y tus digestiones.
Cereales integrales cocidos y fríos
La avena, la quinoa y el arroz integral son otros aliados excelentes de la salud intestinal en verano. Te proponemos incluirlos en ensaladas o tomarlos en boles fríos, individualmente o combinados.
Por sus prebióticos, constituyen una valiosa fuente de fibra fermentable, la cual te vendrá muy bien cuando desees picar algo en vacaciones.
Chocolate amargo (≥70%) en pequeñas dosis
De manera controlada, el chocolate negro es otra alternativa interesante. ¿Sabes que estimula el crecimiento de bacterias beneficiosas? Con moderación, por supuesto, anímate a incluirlo en los helados probióticos o como topping saludable en otros postres, como el yogur o el kéfir.
Alimentos veraniegos frecuentes que perjudican tu salud digestiva
Tan importante como tener claro qué te conviene comer, es saber qué ingestas debes evitar. Fíjate en esta relación de comestibles habituales en los veranitos de los que debes huir porque son dañinos para tu sistema digestivo:
- Comidas fritas o grasientas como patatas fritas, empanadas y snacks. No solo son difíciles de digerir, también retardan el vaciado gástrico y suelen alterar la microbiota intestinal.
- Helados industriales comunes (sin probióticos). Su composición alta en azúcares, grasas trans y emulsionantes los convierte en pequeñas bombas de relojería para tus digestiones. Pueden causar inflamación o malestar en personas sensibles. ¿Te gustan mucho al combatir el calor intenso de estas fechas? Deja de preocuparte, en cuanto descubras los helados saludables de Proasis te olvidarás de ellos.
- Carnes procesadas. Las salchichas, las hamburguesas y los embutidos presentan un bajo contenido de fibra y, con frecuencia, alteran la flora intestinal y generan digestiones pesadas.
- Bebidas azucaradas y cócteles. Ocasionan una fermentación excesiva en el intestino, por lo que favorecen la hinchazón abdominal y la disbiosis.
- Postres ultraprocesados, en especial las tartas, las brevas y las galletas industriales. Suponen ingestas desmedidas de grasas trans y azúcar refinado. Además, suelen generar inflamación y estreñimiento.
- Quesos muy curados o cremosos. Acostumbran a dificultar la digestión y producen gases. Si los tomas en exceso, acabarás padeciendo desequilibrios digestivos.
Después de haber leído este contenido, eres más consciente de que tu salud intestinal en verano depende de ti. Ya sabes lo que debes comer y lo que no. Es, en realidad, una cuestión de cambiar hábitos. En cuanto pruebes los helados Proasis, verás que no resulta tan difícil mejorar tu salud digestiva y general.
Fuentes de investigación
- https://www.proasis.com/
- https://vithas.es/consejo/7-alimentos-de-verano-que-cuidaran-y-protegeran-nuestra-salud-digestiva/
- https://www.39ytu.com/expertos/cuidar-tu-microbiota-en-verano
Imagen
- Fuente: Pixabay
- Autor: (Anónimo)
- Enlace: https://pixabay.com/photos/smoothie-drink-spinach-green-1724728/